Un reloj habría sido la pista que siguieron los miembros de la Policía Judicial del Guayas en la investigación para poder dar con el paradero de Carlos Júnior Santana Anchundia, alias Tierrita, uno de los asesinos confesos de Claudia Poppe y su madre Sonia Jaramillo, ocurrido el 13 de septiembre pasado en el condominio La Vista de Lomas de Urdesa.

Así lo reveló el jefe de la PJ-G, coronel Edmundo Mera. Tenemos la dirección de un hombre, que habría comprado un reloj a los presuntos asesinos en 50 dólares”, refirió, tras señalar que los otros cinco relojes que Santana, Jorge Eduardo Álvarez Conforme, alias Nayder, y David Morales (prófugo) supuestamente sustrajeron del departamento, fueron desechados porque carecían de valor.

Mera mencionó que otra de las pistas que tienen es el cuchillo con el que alias Tierrita habría asesinado a las dos mujeres, el cual habría sido lavado. A su criterio, esas evidencias son suficientes para procesar a los detenidos.

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Ayer en la tarde se realizó una reconstrucción de los hechos en el departamento de las víctimas, diligencia en la que participaron Santana y Álvarez. En presencia del fiscal René Astudillo; la jueza cuarta de Garantías Penales, Dora Vargas, y el coronel Mera se clarificó entonces que ellos escalaron un muro lateral del edificio hasta llegar al hogar de Poppe. Ello, pese a que desde esa perspectiva es muy difícil visualizar los departamentos del edificio.

En todo momento se escuchó a Álvarez insistirle a Santana en que diga la verdad, pero alias Tierrita le respondía que se acordara que él sí estuvo ese día en el lugar, tal como ocurrió cuando se realizó la audiencia de formulación de cargos.

Mera aseveró que la reconstrucción de los hechos era una diligencia necesaria para que la ciudadanía no tenga dudas de por dónde ingresaron los sujetos imputados para cometer el homicidio.

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El jefe policial reconoció que aún hay muchas dudas por despejar en este caso y citó entre ellas las declaraciones de los guardias.

“Ellos mismos dijeron que había otras entradas por donde no había cámaras, y después dejan entrar al novio de la chica y como lo conocen no lo anotan en la bitácora”, dijo.

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En el departamento de las Poppe ayer solo habían muebles, los objetos personales fueron retirados en la mañana por familiares, para donarlos a fundaciones. En la casa del padre y abuelo de las víctimas, Víctor Hugo Jaramillo, una persona informó tanto el miércoles pasado como ayer que los dueños de casa no se encontraban, por lo que no se pudo conocer su opinión sobre los resultados obtenidos en este caso de doble crimen.

Sobre la saña con la que mató a Sonia Jaramillo, Mera explicó que la reacción del criminal fue porque “la señora se les enfrentó y se puso nervioso”.

La madre habría muerto primero y antes de que la mataran forcejeó con su asesino.

La joven, en cambio, habría sido asesinada por resistirse a que sus agresores la violen.

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La versión dada a la Policía señala que pensaban ingresar al tercer piso porque vieron una ventana abierta, pero como observaron mucho movimiento optaron por escalar más hasta llegar al quinto piso.

Sin embargo, ayer también hubo contradicciones. En la recreación de los hechos Carlos Santana alias Tierrita ingresó por la puerta y no por la ventana como había asegurado la Policía en primera instancia.

‘Asesino es psicópata’
A decir del jefe de la PJ-G, la conducta de Santana es la de un psicópata.

“Una persona que comete este tipo de delitos no está dentro de sus cabales. Refirió que de las averiguaciones que han hecho Santana proviene de una familia disfuncional.

Primero vivió con su madre, la cual lo abandonó y luego se fue a vivir con su padre quien lo mandó a Jipijapa, Manabí, de donde escapó a los siete años para regresar a Guayaquil.

Detenciones: Antecedentes
Otros delitos
Edmundo Mera, jefe de la PJ-G, indicó que los supuestos implicados en el doble crimen estuvieron detenidos en el 2006 y fueron procesados pero nunca recibieron sentencia. Dijo que en febrero pasado recuperaron su libertad y salieron a delinquir bajo su modus operandi (meterse a las casas, robar y violar a sus víctimas). Carlos Santana Anchundia, uno de los acusados, registra siete detenciones: tres en el 2003, por robo; una en el 2004, por violación de domicilio y robo, y dos en el 2006, por violación de domicilio y robo.