Los jefes de las milicias de izquierda y ultraderecha que actúan en Colombia deben regresar a unos 13.000 niños que mantienen en sus filas antes de noviembre o de lo contrario podrían enfrentar un proceso en la Corte Penal Internacional, advirtió este sábado un legislador.

El congresista oficialista Jimmy Chamorro señaló que los menores que están en las filas de las guerrillas y los grupos paramilitares deben ser entregados antes de noviembre, cuando vence la reserva que Colombia interpuso cuando aceptó en 2002 la competencia de la Corte Penal Internacional.

Publicidad

Esa reserva aplazaba la entrada en vigencia de la competencia de la CPI para conocer de crímenes de guerra cometidos en Colombia, como una forma de facilitar acuerdos en el marco de una posible negociación de paz.

Si los grupos armados colombianos, "a partir del primero de noviembre siguen reclutando menores y la justicia colombiana no los procesa, la CPI entrará a perseguirlos", explicó Chamorro a periodistas.

Publicidad

Según cifras de Unicef, al menos 13.000 menores hacen parte de las filas de los grupos armados, que en amplias zonas rurales de Colombia practican una norma según la cual cada familia debe entregar un hijo para contribuir a la guerra.

La mitad de los reclutamientos de menores son atribuidos a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la principal organización armada ilegal del país.

Chamorro anunció que el lunes se iniciará una campaña con una marcha que recorrerá durante cerca de dos meses 24 de los 32 departamentos de Colombia, para promover que los grupos armados reintegren a los menores.

El Congresista dijo que ya hay organizaciones internacionales que han expresado su interés de llevar ante la CPI el caso de los niños colombianos integrados en los grupos armados.