Narcisa Paredes, madre de un conscripto que estaría con el 55% de su cuerpo discapacitado debido a los presuntos maltratos físicos que recibió en un reparto cerca de Cuenca, informó que ayer en la mañana llegaron tres militares a su casa para llevarse a su hijo, pero que ella y su esposo lo impidieron porque no quisieron especificar dónde lo iban a trasladar; además, que pretendían que ningún miembro de la familia lo acompañe.