El paradero del cadáver del número dos de las FARC, Raúl Reyes, muerto hace 13 meses por un bombardeo colombiano a su campamento en Ecuador, se convirtió en un misterio después que su familia aseguró que las autoridades nunca se lo entregaron como afirmó el gobierno.
La familia de Reyes aseguró en una carta que "el Gobierno no entregó en su momento el cuerpo de nuestro padre, hermano y tío Raúl Reyes", poco después que el jefe de la Policía, general Oscar Naranjo asegurara que el cuerpo había sido devuelto a sus allegados para que lo sepultaran.
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Reyes murió junto a otras 24 personas -entre ellas cuatro mexicanos y un ecuatoriano-, en un bombardeo de aviones colombianos sobre el campamento que había establecido en la provincia ecuatoriana de Sucumbíos, el 1 de marzo de 2008.
Tras el bombardeo, tropas colombianas incursionaron en Ecuador y se llevaron su cadáver, junto el de otro rebelde abatido, el cual fue transportado a Bogotá para su identificación por peritos forenses.
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La operación en que murió Reyes, de 59 años, desató una crisis diplomática que llevó a Ecuador a romper las relaciones diplomáticas con Colombia.
El fin de semana, las marxistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), pidieron la entrega de los cadáveres de Reyes y de Iván Ríos, otro integrante de la cúpula rebelde asesinado también a comienzos de marzo de 2008, por uno de sus lugartenientes que se entregó a las autoridades para cobrar la recompensa que se ofrecía.
La guerrilla, en una carta entregada al grupo "Colombianos por la Paz", dijo en el mismo texto que a cambio estaba dispuesta a entregar el cadáver del mayor Julián Guevara, quien murió en febrero de 2006 por enfermedad en la selva tras siete años de cautiverio.
La senadora opositora Piedad Córdoba, promotora de "Colombianos por la Paz", un grupo conformado por intelectuales y políticos que buscan abrir camino a una solución incruenta del conflicto colombiano, dijo a la AFP que "espera una respuesta del gobierno" sobre el tema.
Acta firmada sin cuerpo
El lunes, el general Naranjo, responsable de la operación en que murió Reyes, rechazó la posibilidad de hacer una canje de cadáveres. "No hay nada que canjear", dijo el oficial tras asegurar que "los familiares recibieron los restos en su momento oportuno y así lo confirma un acta firmada" por ellos.
Pero el abogado de la familia de Reyes, Rodolfo Ríos, lo desmintió y dijo este miércoles a la AFP que "si bien los familiares firmaron un acta, el cuerpo nunca les fue entregado".
"Ellos se abstuvieron de entregarlo con el argumento de que había 'ordenes superiores', por eso el paradero del cadáver es un misterio", agregó.
En marzo de 2008, la Fiscalía colombiana dijo a la AFP que el cuerpo de Reyes fue sepultado en un lugar secreto.
El cadáver de Reyes, cuyo verdadero nombre era Luis Edgar Devia, fue reclamado entonces por María Hilda Collazos, quien aseguró ser su ex esposa.
Varios textos sobre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) mencionan que Reyes mantenía una relación con Olga Marín, también integrante de la guerrilla e hija del fundador del grupo, Manuel Marulanda ('Tirofijo').