La alegría sumada a la reflexión. Esta es la fórmula que llevó el grupo Minga de Arte por la Vida, del Instituto de la Niñez y la Familia, a las alumnas del colegio San Vicente de Paúl de esta ciudad.
En la madrugada del pasado 12 de febrero esta institución educativa quedó destruida por el incendio que consumió prácticamente todas sus instalaciones. Por ello, las educandas se encuentran laborando en el Instituto a Distancia Chimborazo, al norte de Riobamba.
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La obra teatral, que sacó más de una sonrisa a las adolescentes, recreó el cuento clásico de los Tres Chanchitos, en donde el fuego era simbolizado por el lobo. “El mensaje es que pese a las circunstancias difíciles siempre habrá la oportunidad de salir adelante”, dijo Maité Gavilanes, del segundo de básica.
Las obras culturales además envían mensajes como el que “las cosas materiales quedan en segundo plano porque lo que debe estar primero es el apoyo moral y emocional de todos aquellos que nos rodean para superar los momentos difíciles de la vida”, señaló la alumna Lorena Mejía.
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Las estudiantes aspiran a que las tareas de reconstrucción se cumplirán pronto con el apoyo de las autoridades seccionales y personas “de buen corazón”.
Autoridades del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), que organiza esta campaña, buscan continuar con esta actividad psicoemocional para que las alumnas y maestros del plantel se recuperen de esta pérdida material y continúen con sus tareas educativas.
“El impacto que sufrieron las estudiantes al ver su establecimiento quemado será inolvidable, obviamente queda cierto trauma”, manifestó el inspector de la institución, Fernando Amores, al tiempo de agradecer por este apoyo.
La terapia colectiva se realiza desde el pasado jueves y está dirigida a las estudiantes de primaria y secundaria. Ayer, las presentaciones de la Minga del Arte por la Vida terminó con las alumnas de bachillerato.
Los organizadores aspiraban a llegar con esta campaña a 132 estudiantes.
Fueron 12 mil metros cuadrados del colegio religioso, regentado por las Hermanas de la Caridad, los que se consumieron en el siniestro.
Actualmente se realizan los trabajos de reconstrucción con aportes del Consejo Provincial y otras instituciones.