QUITO.- El presidente de la República, Rafael Correa, a través del Decreto Ejecutivo Nº 1486, autorizó al Ministerio de Minas y Petróleos para que por medio de Petroecuador renegocie el contrato de servicios específicos que el Estado mantiene con la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), con miras a terminarlo.
El decreto, firmado el 15 de diciembre anterior, establece en el artículo 3 que el proceso de renegociación “deberá tender a que Petroecuador, a través de su filial Petroproducción, asuma la titularidad de la administración y obligaciones del contrato”, según consta en el documento.
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Hasta el momento, informó la petrolera estatal, la revisión continúa y aún no existen resultados finales.
A mediados de octubre, el Primer Mandatario, en su habitual enlace radial de los sábados, cuestionó la presencia de la Espol en el campo petrolero Gustavo Galindo Velasco y pidió la revisión del convenio.
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El área está ubicada en el bloque 2, en la península de Santa Elena, en la provincia que lleva el mismo nombre.
El Mandatario justificó tal solicitud, al manifestar que la universidad recibe $ 70 millones por concepto de la explotación petrolera del área, lo que implica que el Estado se queda con “migajas”.
Una versión que fue precisada por las autoridades del centro de estudios, al comunicar que fueron $ 43,7 millones y no $ 70 millones.
El decreto difundido ayer, sin embargo, sorprendió a Moisés Tacle, rector de la Espol, quien vía telefónica dijo no conocer del documento.
Con asombro comentó que desde hace tres meses ambas interesadas están renegociando el contrato con el afán de obtener una salida viable, que según él ya existe, pero que aún no es pública porque requiere el aval del ministro de Minas y Petróleos, Derlis Palacios, quien está fuera del país.
El contrato de servicios específicos, señala el decreto ejecutivo, deberá terminar de conformidad con el marco legal y de acuerdo con las estipulaciones contractuales vigentes. Algo que, según a Petroecuador, no ocurre.
OPERADORA
Mientras tanto, Boris Abad, presidente de Pacifpetrol, operadora del campo petrolero en mención, aseguró que el trabajo de la empresa que representa no está en riesgo porque el documento (que lo recibió en el exterior en horas de la tarde de ayer), solo cambia el administrador y no el operador.
El directamente afectado, dijo Abad, es la Espol. “Como contratista necesito preguntar a Petroecuador que hago aquí (en el campo), aquí estoy”.
El bloque 2, en donde también opera Canadá Grande y que no es mencionada en el decreto, produce 1.171 barriles diarios de crudo.