Nadie quería quedarse fuera de las fotos, “para que quede constancia de que estuvieron trabajando”. Así, entre retratos y últimas indicaciones, más de 40 miembros del Movimiento PAIS iniciaron su jornada como veedores de las elecciones en el colegio La Inmaculada, parroquia Ximena.

Uno de los delegados, quien no dio su nombre, contó que además del desayuno y el almuerzo, les ofrecieron $ 10 por su labor, mientras, otros  admitieron estar presentes por conseguir a futuro un empleo.

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Un veedor de Movimiento PAIS del colegio Cristóbal Colón aseguró que “con la promesa del Gobierno de reestructurar las entidades públicas, se abrirán oportunidades de empleo que hay que aprovechar”.

Azucena Baque, quien llegó desde la cooperativa Mariuxi Febres-Cordero, en el Guasmo, hasta el colegio Sagrados Corazones, afirmó que aunque antes trabajó por la lista 6, “nunca obtuve nada”, por lo que optó desde las elecciones pasadas por apoyar al actual presidente Rafael Correa, no solo porque está “convencida del proyecto de gobierno” sino también para ver “si puedo conseguir trabajo en mi profesión de auxiliar de enfermería” o para uno de sus cuatro hijos, de 25, 24, 21 y 19 años, todos desempleados.

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A ella la llevaron al lugar y le ofrecieron tres dólares y el almuerzo por su labor.

“Nosotros no tenemos la plata para pagar a la gente ni para comprar comida, somos unos 350 estudiantes de Guayaquil que decidimos unirnos para vigilar el proceso”, manifestó el alumno de la Universidad Santa María, Jorge Mancheno, quien fue uno de los seis delegados del movimiento Juventud Ecuador en el colegio La Inmaculada.

También empleados municipales se encontraban entre los delegados, y uno de ellos, que prefirió el anonimato, señaló que los obligaron a participar y que para el efecto  recibieron capacitación el pasado sábado en el coliseo Abel Jiménez.

En el Sagrados Corazones, Mauricio Murillo Mora, de 37 años, formó parte de los voluntarios que supervisaron el proceso por el Movimiento Evolución y Construcción Nacional.

“Lo hago por convicción política, además porque estoy agradecido al alcalde Jaime Nebot, porque gracias al programa municipal Aprendamos obtuve un certificado de operador de utilitarios de computación y logré la legalización de un terreno de mi propiedad en el Guasmo norte”, indicó Murillo.

Afirmó que no reciben dinero y que solo les ofrecieron el almuerzo.

Con menos representantes en todos los recintos electorales, también Sociedad Patriótica tuvo delegados para vigilar el proceso, entre ellos Peter Rodríguez, coordinador de otros cuatro compañeros que se hicieron presentes en el colegio Amarilis Fuentes. A él le ofrecieron la comida y 3 dólares  “para colas y movilización”.

Superiores en número
En el colegio Sagrados Corazones había un delegado del Movimiento PAIS por mesa, lo que contrastaba con los dos grupos de oposición, el Movimiento Evolución y Construcción Nacional, que tenían un delegado para cada cinco mesas. Y apenas acudieron dos delegados de Sociedad Patriótica.

Sectores diferentes
Otra diferencia notoria fue que casi la totalidad de delegados del partido de Gobierno provenían de las cooperativas de los Guasmos norte, central y sur, la mayoría madres de familia, mientras que por el lado opositor  eran en su mayoría universitarios o profesionales de clase media y muchos del norte de la ciudad.