La actividad diaria del funcionario se concentraba en los meses de julio y octubre (cuando hay fiestas de la ciudad); en esas épocas recorría obras terminadas. El resto del año lo hacía unas pocas veces al mes. Nunca los fines de semana.
Ahora recorre proyectos en ejecución diariamente; las últimas semanas ha estado en dos o tres sitios en la misma fecha.
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Los sábados, Nebot usualmente hacía sus visitas a las 10:30; las últimas semanas las ha programado para después del mediodía, luego de escuchar la cadena del mandatario Rafael Correa, para contestarle si recibe algún ataque.
En todos los sitios a los que llega se arma una tarima desde la que el Alcalde cuestiona el proyecto de Constitución, porque, a su criterio, afectará el desarrollo de Guayaquil.
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Lo califica de “centralista”, de mermar las libertades de la ciudadanía y de conferirle al presidente un excesivo poder.
En uno de sus discursos, incluso, Nebot advirtió con no postularse a la reelección si es que el Sí ganaba en la ciudad.
A la par, el Alcalde multiplica su presencia en programas de opinión. Y el Municipio ha intensificado la pauta de spots de televisión y cuñas de radio en los que aparece Nebot pidiendo a la ciudadanía rechazar el proyecto de Carta Magna.
La campaña se denomina Guayaquil debe seguir en marcha; en ella ha gastado, en valores brutos, $ 1’063.299. Con los descuentos que hacen los medios a sus clientes, la cifra llega a $ 257.800.
Según la empresa Infomedia, que hace monitoreo del gasto electoral, la propaganda del Municipio llega al 89,9% de la gente unas 33,2 veces.
Por esos spots Participación Ciudadana (PC), que está haciendo veeduría de la campaña del referéndum, considera que Nebot está incumpliendo la Ley de Gasto Electoral que prohíbe a las autoridades elegidas por votación popular hacer campaña promocionando su figura con recursos públicos.
Según una encuesta de Perfiles de Opinión, el 56,4% de los entrevistados ve a Nebot como líder de la campaña por el No.
El consultor político Luis Eladio Proaño indica que el Alcalde ha sustentado su discurso contra el proyecto de nueva Constitución en bases difíciles de replicar: la defensa de Guayaquil.
“Nebot es inteligente, un político fogueado; escogió bien su discurso y lo repite con fuerza, con vigor... No es igual que los otros alcaldes más pequeños que van corriendo a comer con el Presidente para que les den algo, para ser reelegidos con el Gobierno. Ellos no tienen confianza en el voto popular, Nebot sí”, refiere Proaño.
Nebot ha actuado en solitario; no se ha apuntalado en su partido político que no ha tenido una participación importante en la campaña (salvo la publicación de un remitido con sus objeciones), aunque algunos de sus militantes, como el ex diputado Alfonso Harb, han hecho campaña por el No.
TEXTUAL: Lo que dijo
Jaime Nebot
Alcalde de Guayaquil
“La reelección no la quiero yo sino el pueblo, pero, ¿qué hago yo con una Constitución mala?”.