Ayer, el Movimiento Popular Democrático (MPD) pidió al Tribunal Supremo Electoral (TSE) la salida del país de la misión de la OEA por “violentar la soberanía del país”.
Según Gustavo Terán, dirigente del MPD, las intervenciones del jefe de la delegación, Enrique Correa, fueron parcializadas y sesgadas. “Estas estructuras de veeduría cumplen su objetivo de realizar un trabajo informativo a favor del imperialismo”, dijo Terán.
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La Federación de Estudiantes Universitarios (FEUE) amenazó con manifestaciones si “la misión continúa apoyando a la oposición”. “La misión de la OEA es una comisaría de barrio que recibe denuncias sin fundamento como la de León Roldós. Enrique Correa no dice nada por las misas campales de la Iglesia y la propaganda que hace el Municipio de Guayaquil”, manifestó Marcelo Rivera, vicepresidente de la FEUE.
Correa regresa hoy al país tras presentar un informe de actividades al secretario del organismo, José Miguel Insulza.
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Jorge Acosta, presidente del TSE, negó una posible suspensión del referéndum por pedido de la OEA.
El dirigente de PAIS, Eduardo Paredes, aseguró que todos los delegados internacionales son bienvenidos y que hasta el momento no tiene quejas de su trabajo. “Rechazaremos y lo haremos tajantemente cualquier intento de intromisión en la política nacional”, aseveró.