El vencedor de Roland Garros y Wimbledon se quedó ahora con
el oro olímpico.
Rafael Nadal ratificó ayer con el oro en la final de tenis de los Juegos Olímpicos, que la temporada 2008 es la mejor de su carrera: ganó en Rolan Garros, Wimbledon y destronó a Roger Federer del primer lugar de la clasificación mundial de la ATP.
Nadal festejó su condición de número uno del mundo, que asume hoy, proclamándose campeón olímpico al derrotar en la final al chileno Fernando González por 6-3, 7-6 (7/2), 6-3.
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Esta medalla, la primera del tenis español en unos JJ.OO, fue la cereza del postre de un año inolvidable, y que aún no termina, para el tenista mallorquín.
Nadal levantó dos sets points en el segundo parcial y no cedió un solo game.
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“Quiero disfrutar de este momento. Este ha sido uno de mis grandes sueños.
Agradezco a todo mi equipo y a todos los atletas españoles de la Villa Olímpica por todo su apoyo (...). Ha sido una satisfacción enorme ganar esta medalla para mi país y la gente que me apoya”, dijo con emoción el nuevo campeón olímpico.
ADMIRACIÓN POR FEDERER
Rafael Nadal no tiene reparos en reconocer que admira al suizo Roger Federer, a quien hoy reemplzará en primer lugar del ranking mundial. “Técnica y tenísticamente Federer es y ha sido el mejor de la historia, el más completo”, aseguró al expresar que llegar a ser el número uno no lo empalaga.
“Mañana (hoy) seré el número uno, pero igual, habrá torneos donde estaré detrás y es seguro que otra vez estaré segundo en algún momento”, manifestó el mejor tenista del planeta.