Las plagas y las cenizas del volcán Tungurahua afectan a las naranjas.
“Yo quiero procesar jugo de naranja”. Estas fueron las palabras que María Gómez pronunció en agosto del 2006 ante el padre Pedro Miño, director del colegio a distancia José María Velas, extensión 80 de Caluma.
Ahora, después de dos años, María ha visto su sueño hecho realidad: la creación de la Asociación Calumifrutas, que elabora jugo de naranja.
Publicidad
Empezó con una inversión inicial de 24.000 dólares, financiada por organismos como Prolocal (Programa de desarrollo local), cuyos fondos provenían de un convenio del Estado con aportes de la Comunidad Europea, el Banco Mundial, el Municipio de Caluma y luego de Proder (Programa de desarrollo rural territorial), creada en el 2007.
Esta entidad surgió con el propósito de promover la naranja de Caluma, de donde sale el 60% de la producción nacional. Gómez, quien es la presidenta de la asociación, explica que además se la creó con el objetivo de que los estudiantes del colegio a distancia José María Velas, extensión 80, tuvieran con qué pagar sus estudios.
Publicidad
Juan Carlos Guamán, de 21 años, ayudante de operación, y Rosita Pasto, de 31 años, operadora, trabajan procesando el jugo de la naranja y son socios desde hace dos años de la Asociación Calumifrutas.
Pasto explica que la entidad ha sido un apoyo para ella y su familia porque le permitió culminar sus estudios. Además da a conocer el producto de su tierra y le brinda la oportunidad de darles un mejor porvenir a sus tres hijos.
Guamán afirma que entró en este proyecto porque no podía estudiar en un colegio de horario regular, pues debía ayudar a su padre en el desmonte de la cosecha de maíz.
Disminuye producción
Sin embargo, Caluma, que durante años se ha destacado por su abundante producción de naranjas, ha visto reducida su cosecha en los últimos años. Unos lo atribuyen a la afectación que sufrieron los árboles por la ceniza del volcán Tungurahua, primero en 1999 y luego en el 2006, mientras que otros afirman que se debe a que el agricultor no ha recibido capacitación del Ministerio de Agricultura sobre el cuidado y mantenimiento de los árboles de naranjo.
En esta localidad se estima que existen 2.000 hectáreas de cultivos de naranja.
Miguel Echeverría, cultivador de naranjas desde hace 10 años, refiere que ahora los árboles de esa fruta no producen ni la tercera parte de lo que cosechaban antes de la erupción del volcán Tungurahua.
Vicente González, de 31 años, quien labora desde hace siete como descargador de naranjas en la finca de Miguel Echeverría, dice: “Antes, con un árbol, en un día se llenaban 23 chalos (canasta plástica trenzada), y en cada una cabían 160 naranjas, lo que daba un total de 3.680 naranjas, mientras que ahora obtiene cinco canastas de cada árbol con 800 naranjas”.
Boanerges Aguayo, gerente de la Asociación Calumifrutas, afirma que hace seis años los árboles producían naranjas durante todo el año y ahora solo seis son los meses de producción de esta fruta: abril, mayo, junio, julio, agosto y septiembre; en este último mes comienza a escasear la fruta.
Según Carlos Andaluz, director del Ministerio de Agricultura, la cosecha de naranja en Caluma se mantiene estable y afirma que el promedio anual estimado de producción es de 3.000 toneladas métricas en el 2007, pero que en el 2006 sí se registró una disminución, pues bajó a 2.500 toneladas.
Plagas
El pajarito, gomosis, musgo de piña y pulgón son algunas de las plantas parásitas que se alimentan de la sábila del naranjo y afectan la producción de este cítrico en las zonas agrícolas.
Proyecto del Magap
El director del Magap en Caluma, Carlos Andaluz, dijo que hace 15 años que la entidad no recibía fondos para proyectos, pero este año el gobierno asignó recursos para ayudar a los agricultores.