España le ganó por primera vez en su historia, en un gran torneo, a Italia 4-2 por penales y pasó a semifinales del campeonato europeo, instancia a la que no accedía desde 1984. Ello despertó una euforia ilimitada en su afición, que cree que ahora sí la Furia Roja conseguirá su segundo título importante que se le niega desde 1964.