Funcionarios, empleados, trabajadores, están para buscar soluciones y no para crear o agudizar problemas, más aún si es delegado, coordinador, jefe, etcétera, de alguna unidad, porque debería ser un guía conforme a los principios de equidad, solidaridad, calidad, eficiencia, sobre todo considerando el bien común.

Me acerqué a la ventanilla de afiliación de la agencia del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en el cantón La Libertad, para solicitar un certificado. La atención del empleado fue muy cortés, sin embargo el proceso del documento, fue un triunfo.

La computadora destinada para dar dicho servicio, según me enteré, se trata de un aparato del año 1993 que fue donado por una ex institución bancaria.

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El empleado tenía que dirigirse varias veces a utilizar otra computadora que se encuentra en la oficina de la central patronal del IESS.

Internamente, empleados de otros departamentos hacen turnos para usar esa máquina y así poder resolver las diversas inquietudes de los trabajadores y afiliados.

Era entonces comprensible la desesperación del mencionado funcionario para dar información necesaria a las personas que acuden a esa dependencia por un servicio.

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Al culminar la odisea uno como usuario se pregunta, ¿y qué hacen los coordinadores de esta agencia? ¿Habrá quizás alguna autoridad que se encargue con amor a su trabajo y busque realmente una solución a los problemas de los afiliados y de los trabajadores?

Hugo Rodríguez,
Santa Elena