Una huelga de seis horas de los trabajadores de los ferrocarriles estatales de Hungría (MAV) en protesta contra el proyecto de cierre de líneas poco rentables, perturbó gravemente el transporte ferroviario del país el miércoles por la mañana.
"La huelga procede según lo previsto; los trenes se pararon en todo el país", declaró el presidente del Sindicato Libre de los Trabajadores Ferroviarios (VDSZSZ), Istvan Gasko, a la emisora comercial Inforadio.
Unos 10.000 trabajadores del MAV siguen la huelga, que ha paralizado a más de 1.300 trenes, según el sindicato.
Ante la advertencia del paro realizada por los medios de comunicación en los últimos días, una gran mayoría de viajeros evitó personarse en las estaciones ferroviarias, que el viernes presentaron un inusual aspecto desierto.
El portavoz del MAV, Imre Kavalecz, anunció que los trenes se pondrán en función a la hora prevista del final de la huelga, las 11:00 GMT, pero advritió que el tráfico sólo será normal a partir del jueves.
La huelga de los ferrocarriles debería ir acompañada por movilizaciones en los sectores de sanidad, educación y energía.
"Además de protestar por el cierre de algunas líneas ferroviarias, los trabajadores lo hacen también contra la privatización de algunas instituciones de sanidad y las nuevas reglas del sistema de jubilaciones que deben aplicarse en 2008", precisó Istvan Gasko.
El martes, el gobierno húngaro dio marcha atrás y prometió no cerrar las líneas ferroviarias poco traficadas. Sin embargo, esa promesa fue rechazada por los sindicatos, que la juzgaron "vacía, porque no da garantías".
En Budapest, el paro ferroviario provocó numerosos atascos en los accesos a la ciudad.
Sin embargo no ha paralizado a Hungría, como en cambio ha sucedido en Francia y Alemania en los últimos días por sendas huelgas en el transporte público con gran seguimiento.
El paro de los ferroviarios húngaros es el tercero desde octubre en este país del centro de Europa.
Está prevista para el miércoles por la tarde una manifestación ante el parlamento húngaro, en Bucarest.