El presidente Rafael Correa firmó este jueves un decreto que establece que el 99% de las ganancias extraordinarias que obtienen las empresas petroleras que operan en el país vayan a las arcas del Estado y el 1% en beneficio de la compañías.
La Secretaría de Comunicación de la Presidencia aseguró que el decreto no altera los contratos establecidos con las firmas petroleras, que también han sido ubicadas en un proceso de renegociación.
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Según la Secretaría, de momento existía una distribución a partes iguales de las ganancias extraordinarias obtenidas por la docena de compañías privadas que operan en el país.
El gobierno ha señalado que el alto precio del petróleo crudo en el mercado internacional ha generado grandes beneficios para las empresas petroleras privadas y considera que la distribución de ese excedente de ingresos en partes iguales perjudicaba al Estado, que es el dueño del recurso, según la Constitución.
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Durante el anterior gobierno del presidente Alfredo Palacio (abril 2005-enero 2006) se estableció que el beneficio de los ingresos petroleros extraordinarios debían repartirse en partes iguales.
El petróleo es el principal producto de exportación de Ecuador y su venta financia casi el 35 por ciento del presupuesto del Estado.