Israel dio este lunes la bienvenida a un anuncio de Estados Unidos de que Siria participará en una próxima conferencia de paz en Medio Oriente, señalando que no tiene problema alguno para sentarse a la mesa de negociaciones con su archienemigo.

El anuncio israelí fue formulado mientras el primer ministro Ehud Olmert dijo que su país no está interesado en un enfrentamiento armado con Siria, tres semanas después que Israel realizó un misterioso bombardeo aéreo de instalaciones sirias cerca de la frontera con Turquía.

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Israel no ha admitido públicamente la incursión, pero Benjamin Netanyahu, principal líder de oposición, dijo el miércoles pasado que él estuvo involucrado desde el comienzo en el ataque israelí a Siria el 6 de septiembre, y que le brindaba pleno respaldo.
  
Israel ha criticado a Siria por su respaldo a los grupos radicales palestinos Hamas y Yihad Islámica, así como su patrocinio del grupo islámico Hezbolá en el Líbano.
  
El domingo, la secretaria de Estado norteamericana Condoleezza Rice dijo que varios países árabes, entre ellos Siria, serán invitados a una conferencia sobre paz en Medio Oriente patrocinada por el presidente de Estados Unidos George W. Bush. La conferencia se realizaría en el último trimestre del año.
  
Miri Eisin, vocera de Olmert, dijo que Israel respaldaba el gesto de Estados Unidos hacia Siria. No tenemos problema alguno, señaló Eisin, con respecto a quien Estados Unidos decide incluir (en la lista de participantes) de la reunión internacional.
  
Siria no ha respondido inicialmente a la proyectada invitación norteamericana.
  
Las tensiones entre Israel y Siria se han intensificado desde la incursión aérea israelí a comienzos de septiembre.
  
Hablando en una reunión a puertas cerradas con legisladores israelíes, Olmert dijo este lunes que Israel ha estado vigilando los movimientos de tropas sirias en semanas recientes, pero confiaba en que ninguno de ambos países desea ir a la guerra.
    
No estamos interesados en fricciones, y creo que tampoco están interesados los sirios, dijo Olmert, según informó uno de los participantes en la reunión.