Un abogado del Estado belga pidió este martes que la niña ecuatoriana de 11 años Angélica Cajamarca y su madre, Ana Elizabeth Cajamarca, vuelvan a ser recluidas en un centro para inmigrantes indocumentados, informó la agencia Belga.
El representante del Estado hizo esta demanda ante el tribunal de Bruselas que está revisando el procedimiento judicial de urgencia por el que, el pasado 30 de julio, las dos ecuatorianas fueron puestas en libertad pocas horas antes de su expulsión, cuando eran trasladadas al aeropuerto de Amsterdam para ser deportadas a Quito.
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El juez que adoptó tal decisión alegó que la detención de Angélica durante casi un mes en un centro le causó "un trauma que constituye un trato inhumano y degradante" y violó por tanto el artículo 3 de la Convención Europea de los Derechos Humanos.
Pero el juez no revocó el mandato de extradición que pesaba contra Angélica y su madre, y que por lo tanto sigue vigente.
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En teoría, una nueva reclusión en el centro de indocumentados, como la que solicitó hoy el abogado del Estado belga, sería el paso previo para continuar su proceso de expulsión.
El tribunal de urgencia de Bruselas escucha hoy tanto a los representantes del Departamento de Extranjería del Estado belga como a los letrados de las dos ecuatorianas, que reclaman en cambio su regularización, aduciendo que están integradas en Bélgica.
En el momento de su detención, Angélica y su madre llevaban cuatro años residiendo de manera ilegal en Bélgica, pero no habían presentado jamás una demanda de regularización.
Tras los sucesos del 30 de julio, interpusieron finalmente esta demanda y la fundamentaron "en la integración de la familia en Bélgica, los fuertes lazos entre la niña y su padre -que también reside en la capital belga de forma ilegal y recientemente también ha sido detenido- y la escolarización de la niña".
El tribunal de urgencia, que revisa el caso a raíz de un recurso del Estado, prevé anunciar a lo largo de esta jornada, en qué fecha tomará una decisión al respecto.