Según la Fiscalía, en el 2002 guerrilleros obligaron a un chofer del lugar a llevar un mensaje a soldados en un retén, quienes luego hallaron el cadáver de un menor de 14 años con tres kilos de explosivos, envuelto en papel de regalo, y una leyenda en la que las FARC se atribuían el hecho, por orden del Secretariado, el cual integra Trinidad.