Cuba recordará el lunes el 81 cumpleaños de Fidel Castro sin grandes festejos, con el líder aún luchando contra una enfermedad que lo mantiene alejado del poder desde hace un año y de cuya salud no se sabe nada nuevo.

Las autoridades no habían convocado hasta este sábado a ningún festejo, y sólo están previstas actividades aisladas de organizaciones sociales y políticas, y brigadas latinoamericanas, aunque no se descartan sorpresas.

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Fidelista a morir, Amelia Suárez, educadora de 36 años de una guardería  infantil de El Vedado, recuerda que Fidel "siempre ha manejado su vida íntima a  discreción, aunque a veces queremos saber más de su salud".

"Lo importante es que le deseamos un feliz cumpleaños y sobre todo que se recupere bien. El no necesita de comerciales", apuntó.

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Castro llega a los 81 años dedicado a escribir sus "Reflexiones de  Comandante en Jefe" -37 publicadas en el diario oficial Granma desde el 29 de  marzo- donde trata diversos temas, aunque siempre termina enfilando los cañones  hacia Washington.

Acosado, como dice, por las preguntas sobre cuándo volverá a funciones, Fidel aseguró que se le consulta "cada decisión importante", en un artículo en  el que recordó que el 31 de julio de 2006 entregó el mando a su hermano Raúl,  cinco años menor, con carácter provisional.

"¿Qué haré? Luchar sin descanso como lo hice toda la vida", dijo sin  responder a la incógnita, lo cual fue interpretado por muchos cubanos como que  no regresará más, incluso aunque mejore de salud.

Durante su reclusión médica, Castro sólo ha aparecido en fotos y en ocho  videos, luciendo primero pijama y luego traje deportivo, pero no de verde  olivo, señal inequívoca para los cubanos de que aún no está bien.

Un año alejado del poder

Hace un año, el 13 de agosto, impactó con las primeras fotos en  convalecencia de la cirugía a la que fue sometido cuatro días antes de ceder el  poder, con un mensaje en el que prometía luchar por su salud, aunque no  descartaba una "noticia adversa".

Ese día fue visitado por el presidente de Venezuela Hugo Chávez,  autoproclamado su "heredero político", con quien celebró desde el lecho de  enfermo, y en su honor hubo conciertos, vigilias y se movilizaron decenas de  miles en tareas del campo.

Pero la apoteosis fue sin precedentes durante una semana de homenaje  -pospuesta a pedido suyo- que empezó el 28 de noviembre con 1.50O invitados  internacionales y cerró con un desfile militar el 2 de diciembre, presidido por  Raúl.

En esos festejos, como en al menos otros tres actos públicos en el último  año, una aparición de Castro fue esperada en vano. Ahora no hay mayor  expectativa, aunque no se descarta una posible llegada sorpresa de Chávez,  quien hace una semana dijo que visitará "pronto" al líder cubano.

En el último video, difundido el 5 de junio, Fidel apareció más recuperado  de peso, de buen ánimo, pero aún frágil y con cierta dificultad para hablar. En  un mensaje escrito emitido el 24 de mayo precisó que había sufrido "varias  operaciones".

"Todo parece indicar que no vuelve a aparecer más, la salud no lo acompaña  a los 81. No sé sabe ni donde está, ni si está vivo o muerto. Son los misterios  de este país", dijo a la AFP el opositor Vladimiro Roca.

Algunas observadores sostienen que Fidel Castro está asumiendo un nuevo  papel como consejero de las grandes decisiones y preocupado por los problemas  más globales, mientras Raúl gobierna y administra, con el gran reto de dar  soluciones a los problemas de la vida cotidiana de los cubanos.

Para el disidente moderado Manuel Cuesta, Fidel está en "una retirada lenta  y gradual de todo lo que representa para Cuba", como único líder que ha  conocido un 70% de los 11 millones de cubanos.

Nacido el 13 de agosto de 1926 en Birán, hijo de un inmigrante gallego convertido en terrateniente y una humilde campesina cubana, Castro ha  dedicado su vida a la revolución, tiene ocho hijos y está casado con Dalia Soto del Valle.