Los boxeadores cubanos Erislandy Lara y Guillermo Rigondeaux, que desertaron de la selección de su país en los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro-2007, sí firmaron contratos profesionales, aseguró este viernes la sociedad promotora alemana, Arena Box Promotions.
"Firmaron contratos, de cinco años, y recibieron dinero", aseguró Matta Mueller-Michaelis, portavoz de la empresa alemana, que fijó en unos 5.000 euros la cantidad que se les habría facilitado como adelanto de la cantidad pactada.
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Esta declaración desmiente las versiones de Lara y Rigondeaux, que negaron haber firmado contrato y aseguraron que no tenían intención de desertar.
Arena Box Promotions ya había contratado a otros tres campeones cubanos hace unos meses, aprovechando una estancia en Venezuela.
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Lara y Rigondeaux desaparecieron el 20 de julio en los Juegos Panamericanos disputados en Río de Janeiro y fueron encontrados a inicios de agosto en Praia Seca, en la turística Regiao dos Lagos.
Tras unos días retenidos en Brasil, ambos fueron deportados a Cuba, donde fueron conducidos a una casa propiedad del Gobierno de la isla. Ya en su domicilio, Rigondeaux, bicampeón olímpico y mundial, se declaró arrepentido y manifestó su deseo de volver a competir, aunque Fidel Castro ya dijo que no volverá a representar al país.
"Voy a volver a boxear, es mi tarea principal (...) Bastante me arrepentí", dijo Rigondeaux a la AFP en su vivienda en un barrio del sur de La Habana.