Un salón tradicional de pintura de los varios que hay en Ecuador, no tiene como responsabilidad absoluta premiar, sino exhibir lo que la mayoría de nuestros creadores están pintando actualmente como información didáctica e informativa de las corrientes contemporáneas que prevalecen en el país. Nos sentimos orgullosos de los pocos salones tradicionales de pintura contemporánea que existen en Ecuador, para regocijo de la mayoría de ecuatorianos que disfrutan con estos; por qué no se realiza un salón paralelo experimental con obras en soportes alternativos, de posvanguardia e instalaciones y neoconceptuales. Las actuales manifestaciones artísticas de importación son obligadas en la era globalizada en que vivimos; pero no confundamos los términos.

Robin Echanique,
pintor, Guayaquil