Derechos que muchos trabajadores hemos perdido (¡auxilio!). Esta carta la dirijo al Gobierno para que revise e investigue a las operadoras portuarias sobre el pago que realizamos los estibadores contratados por tercerizadoras, a los que no se nos reconoce el más mínimo derecho que tiene un trabajador.

El trabajo en puerto no tiene horario de ingreso. El estibador trabaja a la hora de arribo del buque sea de día, noche o madrugada, sin recibir un medio de movilización. Igual sucede cuando termina la descarga si el trabajo termina a las tres de la madrugada, el estibador prefiere pernoctar en el recinto portuario hasta que amanezca y poder viajar en un transporte público, ya que es la única forma para movilizarse a bajo costo. Es que dirigirse a su casa a las tres de la mañana significa coger un taxi, lo cual resulta muy oneroso ya que lo que ganamos no  nos cubre ni siquiera el básico decretado por su gobierno.

Tengo entendido que toda empresa solo puede contratar un 25% del personal para operar con tercerizadoras. Pido al Primer Mandatario del país que mande inspectores a las agencias navieras y compruebe, que dadas pocas excepciones, tienen un mínimo de personal fijo o de planta; la mayoría ni siquiera tiene un personal que trabaje para las empresas, salvo las contratadas por tercerizadoras.

Publicidad

Pregunto al Presidente, si un tercerizador que aporta a un estibador seis meses con un número patronal y los otros seis  con otro número (estas empresas manejan a veces más números patronales), ¿cuándo este trabajador podrá cumplir el tiempo de servicio o aportaciones que necesita para poder acogerse a la jubilación del IESS, y peor aún al derecho a la jubilación patronal?

Raúl Alberto Rojas Bocanera,
estibador, Guayaquil