Víctor Hugo Marchesini. El DT del Olmedo habla del momento de su equipo.
En su época de jugador, Víctor Hugo Marchesini actuaba en el centro de la zaga de los equipos que defendía. Era zurdo, letal con los rivales, áspero en su juego, pero con mucho orden, esto último aspecto es el que el actual técnico argentino del Olmedo ha logrado que sus futbolistas mantengan cuando saltan a la cancha para aplicar sus sistema táctico.
Por ese motivo, los riobambeños son punteros y favoritos para ganar los tres puntos de bonificación para el hexagonal y llegar a la Copa Sudamericana.
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La actual campaña del Olmedo no es casualidad. “Es con base en trabajo y planificación”, recalca Marchesini, quien llegó al club en enero pasado por recomendación de su amigo Gabriel Perrone, ex entrenador del club y ahora estratega del Deportivo Cuenca.
“Trabajamos sobre bases firmes, no hay improvisación”, dice. Pero el ex defensor que defenson que actuó en las décadas del ochenta y noventa agrega un ingrediente que ponen sus pupilos en cada entrenamiento y juego: humildad.
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Ni titulares ni figuras
Marchesini maneja la filosofía de que establece que en el Ciclón de los Andes nadie es titular ni figura. “No le doy la camiseta a nadie, para mí se la gana quien trabaje con humildad, solidaridad con el grupo y quien en los partidos hace anotaciones, defiende bien y evita goles”, indica.
Una de las ventajas del Olmedo es que ha mantenido la base de futbolistas del año pasado. Eso le ha permitido a Marchesini trabajar con varios sistemas tácticos que le han permitido lograr puntos de visitante ante Emelec, Liga de Quito, El Nacional y Deportivo Azogues.
“He variado tres o cuatro sistemas y se han adaptado bien. Tengo un plantel inteligente, que capta rápido, no solo en lo grupal, sino en lo futbolístico. He hecho 4-3-1-2, 4-4-2 y 4-4-1-1, hemos usado línea de cinco, y los resultados nos han acompañado”, comenta con alegría.
La llegada de Marchesini al Olmedo no fue casualidad. Una visita a Perrone, en abril del año pasado, le permitió tener un primer acercamiento con el club y sus dirigentes, entre esos el presidente Eduardo Granizo.
El otrora jugador siguió la campaña del club por internet y en enero pasado recibió una llamada de Perrone, quien le manifestó el interés de ser contratado por el Olmedo. “Me dijo Gabriel que él no iba más en el equipo y que me iban a llamar; me contó que le dio mi nombre y en cuatro días me llamó Tulio Valdivieso (coordinador del equipo), nos pusimos de acuerdo y vine”, refiere.
‘ESTO ES DISNEY’
Dice sentirse a gusto en el equipo. Le agrada la tranquilidad de Riobamba y la calidez de su gente, lo que lo compromete a hacer mucho mejor las cosas.
Acostumbrado a la presión de la prensa como jugador de Boca Juniors, indica que acá no tiene ese problema. “Aquí estoy en Disney”, refiere entre risas. “En Argentina es una selva; acá, mire”, dice mientras señala los alrededores del complejo El Batán, rodeado de árboles y del río Chibun, sin periodistas.
Marchesini se ha trazado tres metas: armar un equipo para clasificar a la liguilla en esta etapa, ser campeón y llegar a Copa Libertadores. “Tengo un club serio que tiene esas aspiraciones”, asegura con orgullo.
“Mientras tenga fuerzas vamos a clasificar a la liguilla y vamos a pelear porque sea uno de los tres equipos que van a la Libertadores”, dice.
Muy personal
EL TÉCNICO
NACIMIENTO
En Gualeguaychú, provincia de Entre Ríos, norte de Argentina, hace 46 años.
TRAYECTORIA
Debutó en Central de Entrerriano, a los 19 años. Jugó en Ferrocarril Oeste, Boca Juniors, The Strongest y terminó su carrera en Ferro. Como técnico, su primer equipo es Olmedo, antes fue o asistente técnico en el Tenerife (España) y Unión de Santa Fe, Quilmes, entre otros.
Lo que dijo
Víctor Marchesini
DT DE OLMEDO
“Yo me preocupo más con los que no son suplentes porque ellos tienen que estar preparados para jugar”.
“Luego de las dos derrotas frente al Deportivo Cuenca vi una reacción grupal muy buena porque después ganamos partidos difíciles”.
“Estoy formando un equipo; tengo quince jóvenes seleccionados con los que estoy trabajando”.
