Ante los últimos acontecimientos ‘intolerables’ de dominio público, y como tenemos que elegir a los asambleístas, considero que debemos recurrir para tal efecto como se hace en el ámbito privado para escoger a los empleados, es decir que cumplan ciertos requisitos para desempeñar el cargo para el que se postulan.
Esos requisitos, como la aptitud, buenos antecedentes, presentar exámenes de encontrarse en buen estado de salud, física y mental; sobre todo, esto último, como por ejemplo, tomarle un test psicológico por si acaso no sufren de algún trastorno mental aunque no profundo (un resentimiento social, intolerancia ante las críticas, no aceptar cuestionamientos, etcétera), que al menos como se ha evidenciado a través de la historia, estos desequilibrios en manos de quien ejerce el poder resultan altamente peligrosos.
Para mí, lo peor es el abuso del poder, porque no hay justicia, peor equidad.
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Leonor Vélez de Ledesma,
abogada, Guayaquil
