La basura, el mal estado de la  avenida Laurice Antón de Salem (principal) y la inseguridad son para Angélica Rosales los problemas más lacerantes que afrontan quienes moran en la ciudadela El Recreo de este cantón.

Ella habita con su familia en una villa, de una planta, en la segunda etapa desde hace ocho años. “Desde que vivo aquí los problemas son los mismos, nadie nos atiende y vivimos abandonados”, se queja.

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Comenta que en invierno la maleza crece en cualquier lugar y la avenida principal cada año se hunde más, pues su estructura presenta huecos, y largas fisuras desde la primera hasta la tercera etapas.

Otra queja es el estado de los postes de alumbrado público. Mario Cajas, morador de la primera etapa, asegura que solamente donde vive existen ocho postes deteriorados y teme que estos se caigan en cualquier momento.

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En un recorrido, un equipo de este Diario constató que entre la primera y segunda etapas existen 18 postes dañados, sin contar con los que se encuentran entre las peatonales.

Juan Monserrate, presidente de la Asociación de Usuarios y Consumidores del cantón Durán, indica que pese a ello, el servicio a cargo de la Empresa Eléctrica Regional Guayas-Los Ríos (Emelgur) es caro, “si se toma en cuenta que el valor promedio en cada planilla es de 30 dólares y allí se incluye el cobro por alumbrado público”.

Manifiesta que los problemas en El Recreo no son recientes, sino que arrastran desde su creación, hace diez años y que con el tiempo se han profundizado y teme incluso que en cualquier momento colapsen.

Como ejemplo cita la recolección de basura la que considera insuficiente. “Un volquete sirve para la primera, segunda y tercera etapas, y otro para la cuarta y quinta etapas”, sostiene.

En El Recreo están registrados 12.300 predios, según el Municipio de Durán, y se calcula que tiene una población de 60 mil habitantes, sin contar con los asentamientos que se han formado a sus alrededores, como las cooperativas Los Ficus, Por un futuro mejor, Nuevos Horizontes, entre otras.

También preocupa la inseguridad. Humberto Benalcázar, director de la escuela Casita de Recreo, en la tercera etapa, dice que hay un cuartel con 22 policías, dos motocicletas y un patrullero que no alcanzan a cubrir toda la ciudadela.

A estos problemas, la alcaldesa de Durán, Mariana Mendieta, argumenta que no todo es responsabilidad del Municipio. “Esa avenida principal está destruida y así la entregó el Miduvi y también la infraestructura de agua potable y alcantarillado sanitario y pluvial”.

Una solución al problema es la reconstrucción total de la arteria y para ello, dice, el Municipio gestiona ante el Banco del Estado un crédito por un millón de dólares, previo a la presentación de los estudios.

“No sé qué fiscalizadores trabajaron, esa obra debió tener 30 años de durabilidad y solo han pasado 10 años”, comenta.

Sobre la recolección de basura, admite que solo tiene dos volquetes y un carro recolector para esa ciudadela, “porque no tenemos más”.

Pero cuestiona que hay moradores que no respetan el horario de recolección los lunes, miércoles y viernes a las 09:00, “La casa más limpia no es la que más se barre, sino la que menos se ensucia” es su criterio.

MÁS DATOS: Creación

Posesión
La ciudadela El Recreo fue entregada en el gobierno de Abdalá Bucaram en 1997. Semanas antes de su derrocamiento miles de personas tomaron posesión de villas aún no terminadas.

Al Municipio
Por convenio, el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi) entregó en junio del 2006 la ciudadela al Municipio del cantón Durán, quien comenzó este año a cobrar impuestos prediales.