Después de casi dos meses de trámites, recorridos por diversas instituciones, organizaciones, de “rogar y soportar humillaciones”, Ramiro Mora Mendoza finalmente consiguió que el Consulado español le conceda “por lo menos” una visa de turista por tres meses para viajar a España y ayudar a su hermano que está grave de salud en un hospital madrileño.