Los intentos del Consorcio Electricidad de Valencia (Eleval) por hacer valer sus derechos como operador de la Corporación para la Administración Temporal Eléctrica de Guayaquil (Categ), apuntan a varios frentes.
El lunes pasado, la empresa venezolana envió una carta al ministro de Energía, Alberto Acosta, solicitando una reunión de trabajo para explicarle los detalles de su contratación, un proceso que el Gobierno ha cuestionado. Y ayer convocó a la prensa a un encuentro para exponer sus logros en Venezuela, los pormenores del concurso, su plan estratégico y para advertir que la situación de la Categ es crítica.
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Luis Figueroa, director ejecutivo de Eleval, señaló que el contrato firmado es legítimo. “Ningún tribunal del Ecuador lo ha cancelado o desconocido y mientras que eso ocurra nuestros derechos y obligaciones estarán ahí”, señaló respecto a que el Consejo Nacional de Electricidad (Conelec) esté al mando de la empresa.
“Moisés Sosa (presidente del Conelec) no es administrador legítimo de la Categ, ni su representante legal; en consecuencia, su firma en los bancos, su representación jurídica en los juicios que la Categ tiene en el país y en el extranjero, no es legítima, y todos esos juicios se van a caer uno por uno”, dijo.
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Indicó que Eleval vino a trabajar y a ganar un honorario mensual y otro variable. Este último, a base de sus resultados. “¿Quiénes de la Categ ganan por resultado hoy? Nadie”, añadió. Hoy habrá una audiencia entre Eleval y Sosa en el Palacio de Justicia por el tema.