Los tres mastodontes del fútbol europeo que son el Chelsea, el Real Madrid y el Inter Milán fueron los más golosos en el mercado de traspasos que se cerró el jueves por la noche, cuando otros clubes se decantaron por la estabilidad a imagen del FC Barcelona, Arsenal o AC Milán.
Shevchenko y Ballack: el Chelsea dio un gran golpe este año al arrebatar al AC Milán y al Bayern Múnich sus dos superestrellas venidas a brillar en la constelación londinense, de la que desfilaron el argentino Hernán Crespo (Inter Milán) y Gallas, que se unió a los 'Frenchies' del Arsenal.
El club de Wenger y Henry se limitó a reclutar, además del defensa francés, únicamente a Rosicky y al brasileño Baptista. Los 'Gunners' en cambio perdieron a Pires (Villarreal), Bergkamp (retiro) y Campbell (Portsmouth).
Los otros dos aspirantes al título inglés, Manchester United y Liverpool, mostraron una mayor pusilanimidad aún: MU compensó la salida de van Nistelrooy al Real Madrid con la llegada del defensa Carrick, mientras que el Liverpool no reclutó ningún gran nombre.
El West Ham sorprendió al contratar in extremis a los argentinos Mascherano y Tévez, más aún cuando este último era deseado por el Chelsea.
Las desdichas de la Juventus Turín hicieron la felicidad de otros. Relegado a la Serie B en el marco del escándalo del Calcio, el club de Deschamps, su nuevo entrenador, fue literalmente saqueado, por paquetes de a dos: Vieira-Ibrahimovic al Inter Milán, Thuram-Zambrotta al FC Barcelona y Emerson-Cannavaro al Real Madrid.
El Inter, que heredó el título de campeón 2006 de la relegada Vieja Dama, reclutó también a Maicon, Grosso, Dacourt y Crespo, mientras que el trueque brasileño Adriano-Ronaldo no se concretó.
Además de Shevchenko, el AC Milán dejó ir a algunos de sus veteranos (Stam, Rui Costa, Vogel) y sólo recrutó al joven francés Gourcuff y al brasileño Oliveira.
El Real Madrid tuvo más apetito y parece renovar los años "galácticos" de Pérez, pero con una fuerte tonalidad defensiva bajo la tutela de Capello, de vuelta sobre el banquillo merengue. La roca Cannavaro en defensa central, el monstruo Mahamadou Diarra y el limpiaparabrisas Emerson en el medio personifican este renacimiento, completado por Van Nistelrooy y Reyes en ataque.
El Barça renovó su retaguardia (Thuram, Zambrotta) sin olvidar su fuerza en ataque (Gudjohnsen, Saviola). En España, el Atletico Madrid reveló sus ambiciones con unos fichajes juiciosos, con el triplete venido del Dinamo Moscú (el defensa griego Seitaridis y los medios defensivos portugueses Maniche y Costinha), sin olvidar la joven perla argentina Agüero.
El Levante, club valenciano ascendido a la élite española, se desmarcó como el Arsenal español: cinco franceses (el defensa Déhu, el medio Berson y los atacantes Kapo, Robert y Luyindula) se unieron a su compatriota Laurent Courtois, ex jugador de Olympique Lyon y Toulouse, en Levante desde 2005.
En Francia precisamente, el Lyon se reforzó con Kallstrom, Squillaci, y Toulalan, y perdió a un Diarra (Mahamadou, internacional malí) para ganar otro (el 'Bleu' Alou), sin llegar a reclutar al delantero centro esperado. El Olympique Marsella logró la cesión de Djibril Cissé (operativo hacia octubre) y contrató al camerunés Mbami, procedente del París Saint-Germain.