Cada uno de los 23 jugadores de la selección brasileña que disputó la Copa de Alemania 2006 recibirá 40.000 dólares (920.000, en total) como premio por su participación en el Mundial pese a la decepcionante actuación del equipo y a su prematura eliminación, informó ayer el diario Extra.

La revelación fue hecha al diario de Río de Janeiro por uno de los jugadores, que pidió no ser identificado.

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Según la versión periodística, el premio podría haber llegado a 200.000 dólares por jugador en caso de que Brasil hubiese conquistado su sexto título mundial en Alemania.

Brasil era considerado el máximo favorito para quedarse con el campeonato en el 2006 y fue eliminado por Francia en cuartos de final, tras una decepcionante actuación de jugadores considerados entre los mejores del mundo, como los atacantes Ronaldo y Ronaldinho Gaúcho.

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“Si hubo algo que no perjudicó a la selección puedo afirmar que fue la premiación. Todo fue discutido temprano y todo el mundo aceptó. El premio no es excepcional. Lo más importante era haber disputado una buena Copa”, aseguró el mundialista brasileño que no quiso ser identificado en sus declaraciones a Extra.

Según el periódico carioca, el premio a los eliminados saldrá de los cerca de 9,4 millones de dólares que la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) recibirá de la FIFA por su participación en el Mundial y por haber llegado a cuartos de final.

En caso de la conquista del título, la Confederación hubiera recibido 20 millones de dólares de la FIFA y otros 6 millones de dólares del fabricante de material deportivo Nike, su patrocinador.

Contactos para fichar a Scolari
Según la edición de ayer del diario Folha de Sao Paulo, la Confederación Brasileña de Fútbol ha iniciado contactos con Luis Felipe Scolari para que el DT de Portugal retorne a dirigir a Brasil. El contrato con los lusos termina el próximo  31 de julio. “No tengo razones para irme, pero si me invitan en Brasil, lo pensaré”, dijo Scolari.

El dinero no es todo en la vida
En Folha  de Sao Paulo, Luiz Felipe Scolari recalcó que se siente feliz en Portugal, pero sería un nuevo desafío volver a entrenar a Brasil. “Con la selección viví una época maravillosa”, comentó el estratega. “En Brasil no podrían pagarme lo mismo que en Portugal, pero eso no lo es todo en la vida. También hay que correr riesgos”, afirmó.