Es la segunda amenaza terrorista interna en dos meses. En junio pasado se arrestó a siete personas por planificar un ataque a la Torre Sears en Chicago.
La policía federal estadounidense (FBI) desarticuló un plan de atentados contra túneles y el metro de Nueva York, planificado por presuntos terroristas islámicos, con el arresto de tres conspiradores y la identificación de otros cinco.