El pronóstico climático del Cenaim declara un cambio en el esquema de las precipitaciones y las altas temperaturas apreciadas en la Costa.
En la última semana de abril la temperatura marina superficial de 26.7° C expresó un significativo descenso de 1.4° C, mientras que la termoclina (capa de agua caliente) se ha mantenido cercana a la superficie activando la alerta naranja de Acuiclima.
Este enfriamiento indica el inicio del cambio de las condiciones climáticas hacia el verano, manifestándose en el área marina alrededor de la península de Santa Elena.
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En la zona interior del Golfo de Guayaquil, con mayor influencia en El Oro, aún persisten las aguas más calientes, al igual que al norte de Manabí y de Esmeraldas.
Los pronósticos marcan una reducción de precipitaciones, principalmente en Guayas y sur de Manabí. La ausencia o disminución de las lluvias puede hacer más caluroso el día y las noches podrían tornarse más frescas. De momento no es factible indicar si el cambio estacional será pronunciado, por preverse la aparición de un evento que a fines de abril o principios de mayo podría atenuar este cambio. Los productores acuícolas deben tomar las medidas apropiadas para controlar las diferencias de temperatura.