Unos 1.100 abogados han renunciado al equipo de defensa de Saddam Hussein citando una protección insuficiente tras el asesinato de dos de sus pares.
Los dos abogados asesinados habían defendido a otras personas que están acusadas junto al líder iraquí derrocado.
En una declaración obtenida el domingo, los letrados no dijeron si el principal abogado iraquí de Saddam, Jalil al-Dulaimi, estaba entre los que se retiraban del equipo de defensa.
Pero el comunicado indicó que otros miembros de ese equipo en Bagdad continuaban con sus labores bajo circunstancias complejas y peligrosas.
Los 1.000 abogados reiteraron su pedido de que sea cancelado el juicio de Iraq, que comenzó el 19 de octubre.