Brasil emprende su camino hacia la Copa del Mundo con un partido amistoso el sábado contra los Emiratos Arabes Unidos, aunque sus planes para un segundo encuentro quedaron frustrados por un inesperado choque con la FIFA y clubes europeos.
  
Los pentacampeones mundiales llegaron en la madrugada del viernes a Abu Dhabi para el desafío.
  
El gigante sudamericano también tenía planeado jugar el martes contra una selección de jugadores kuwatíes, pero la FIFA se negó a reconocerlo como un amistoso y no obligará a los equipos europeos a ceder a sus jugadores brasileños.
  
La FIFA le indicó a la federación kuwatí de fútbol que los Kuwait All Stars no son considerados una selección nacional.
  
El partido será escenificado el próximo año, dijo la Confederación Brasileña de Fútbol.
    
Me sorprendió. Esto afectará nuestros planes, yo quería probar a 18 jugadores, y ahora no puedo, dijo el técnico brasileño Carlos Alberto Parreira en una entrevista televisada desde Abu Dhabi.
  
El partido del sábado también es una especie de celebración de una temporada exitosa, en la que Brasil ganó la Copa América, la Copa Confederación y la eliminatoria sudamericana para el mundial de Alemania 2006.
    
Fue un año de conquistas. Brasil está en la Copa del Mundo, y ahora queremos terminar el año con dos grandes actuaciones, dijo el capitán Cafú antes de conocer de la cancelación del juego contra Kuwait.
  
La suspensión de ese desafío fue una derrota para Brasil en su lucha de poder con los equipos europeos, que le pagan grandes sumas de dinero a sus estrellas brasileñas y no les agrada tener que prestarlos al equipo nacional.
  
El Milan intentó aferrarse al delantero Adriano, que dijo estar aquejado por una lesión en un hombro, y el Juventus también pidió que el volante Emerson fuera excusado del partido con Kuwait.
    
Si no le hubiesen pedido a la FIFA, tendríamos el partido. Es obvio que hubo presión de los clubes, dijo Perreira.
  
Aún así, la única gran ausencia en el choque con los Emiratos Arabes Unidos es Ronaldo, delantero del Real Madrid, que se recupera de una lesión. La vacante le permitirá al técnico probar la dupla de Robinho y Adriano en el ataque.
    
Estoy orgulloso de servir a Brasil y al Barcelona, pero es difícil pelear con mi club porque, después de todo, ellos pagan mi sueldo, dijo Ronaldinho, la estrella del Barsa. Jugaré donde ellos me digan.