Un grupo de 38 guerrilleros de las FARC que purgaban  condenas en una cárcel del centro de Colombia, se acogieron este viernes a la ley de Justicia y Paz, aprobada originalmente por el Congreso para beneficiar a los miembros de grupos paramilitares que entreguen sus armas, informó el gobierno.
  
El alto Comisionado Para la Paz, Luis Carlos Restrepo, dijo que entre el grupo se encuentran cuatro líderes de alto nivel dentro de las marxistas  Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
  
Restrepo enfatizó que el hecho de que un grupo de guerrilleros se acoja a esa ley, demuestra que su propósito es beneficiar a los miembros de grupos armados que decidan deponer las armas y no únicamente a los combatientes derechistas, como afirmaban sus críticos.
  
La ley de justicia y paz, que establece penas de entre cinco y ocho años para los delitos cometidos por los combatientes que se desmovilicen, ha sido blanco de cuestionamientos de organizaciones de derechos humanos y de la representación de la ONU en Colombia, que temen deje en la impunidad miles de crímenes cometidos por los paramilitares.
  
La ley de justicia y paz fue aprobada en julio por el Congreso y sancionada por el presidente Alvaro Uribe, en cumplimiento de compromisos derivados de las negociaciones con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), que agrupan a los escuadrones derechistas.
  
Desde 2003, Uribe adelanta una negociación con las AUC, que debe culminar en diciembre próximo, y en el marco de la cual unos 10.000 paramilitares han entregado sus armas.
  
Raúl Reyes, número dos de las rebeldes FARC, declaró recientemente que los miembros de las AUC seguirán siendo considerados como objetivo militar por la guerrilla.