Los vecinos de la calle Olmedo, entre Mera y Montalvo, se quejan de que están cansados de los asaltos, atracos y escándalos de los clientes de las prostitutas que laboran en ese sector en la residencial Las Acacias.
El 17 de julio pasado la Dirección de Salud y la Intendencia de Policía clausuraron el local porque desde hace cinco años no ha sacado permiso para funcionar, pero ocho días después las trabajadoras sexuales se ubicaron al pie del exterior de la residencial a ofrecer sus servicios.
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Debido a esta situación, Carmen Ulloa, presidenta del barrio, exige a la Policía que retire de ese sitio a las prostitutas, ya que su presencia da mal aspecto al casco central de Ambato y además permite que lleguen delincuentes y escandalosos a ese sitio.
La semana pasada miembros de la Comisaría de Salud dialogaron con el propietario del centro nocturno Molino rojo, que también queda en el sector, y él se comprometió a permitirles a las prostitutas que trabajen en su local hasta cuando el Cabildo asigne un sitio donde ellas puedan laborar, empero el ofrecimiento fue rechazado por las trabajadoras sexuales.