La UE pretendía cobrar 230 euros (unos 280 dólares) por cada tonelada de banano que ingresara a ese bloque, a partir de enero del 2006.

Los países de la región argumentaron que esa aplicación no podía superar los 75 euros (unos 90 dólares) y el ministro de Comercio Exterior ecuatoriano, Oswaldo Molestina, fue más allá: sostuvo que los estudios determinaban una cifra inferior a los 33 euros.

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Dicho arancel, insistió ayer, ayudará a mantener la cuota de participación de Ecuador y de los otros países en el mercado europeo.

El pronunciamiento del tribunal, conformado por John Weekes, John Lockhar y Yasuhei Taniguchi, dejó satisfecho al Secretario de Estado, quien expresó que “Ecuador ha tenido una victoria contundente en este proceso arbitral”.

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Según el informe del tribunal, publicado ayer por las agencias internacionales, el impuesto de 230 euros era demasiado alto e iba a impedir que los latinoamericanos mantuvieran su presencia actual en dicho mercado.

La decisión de la UE “no implicaría para los productores de banano mantener su acceso total a los mercados”, un elemento fundamental para que la tarifa sea aceptada, manifestaron los árbitros.

Tras el fallo, la Unión Europea tiene diez días para iniciar una nueva ronda de negociaciones con los países que plantearon el arbitraje de la OMC; si en ese lapso no se consigue acuerdo alguno, se pedirá la intervención de un grupo de expertos, quienes deberán emitir su opinión en un plazo de 30 días.

Los próximos 3 y 4 de agosto, los países latinoamericanos mantendrán una reunión en Ginebra (Suiza) con el fin de establecer una estrategia común. Ecuador prepara la suya, pero no la dará a conocer hasta que la UE difunda su nueva propuesta.

Posteriormente, el 5 de agosto, informó Molestina, los países exportadores de banano de la región fueron convocados por la UE; allí se buscará un acuerdo.

El Ministro comentó que, ese día, la UE podría solicitar que las negociaciones tomen un tiempo adicional, ya que “en un día no se puede llegar a un consenso”.
Un arreglo aceptado por las partes evitará un arbitraje legal.

La UE, según las normas de la OMC, tiene la obligación de proponer un nuevo arancel siguiendo las recomendaciones de los árbitros. Si la cifra es considerada excesiva por los demandantes, consideró Molestina, “no se dudará en recurrir a un segundo arbitraje”.

Ecuador espera que la UE haga oficial su nueva posición a más tardar el 1 de octubre próximo.