Una serie de réplicas al sismo de 6,2 grados en la  escala abierta de Richter que sacudió la noche del viernes gran parte del  territorio nicaragüense mantenía ayer en alerta a la población.

Se produjeron al menos seis réplicas con magnitudes de entre 3,7 y 5,5 grados según informes del Instituto Nicaragüense de Estudios  Territoriales (Ineter), con un epicentro en el océano Pacífico.

Especialistas de Ineter afirmaron que los sismos son provocados por el choque de las placas continentales Coco y  Caribe y descartaron posibles olas gigantes o tsunamis.