Fue visto que la gente que manejó al equipo los cuatro años anteriores no pudieron hacer nada ni pusieron orden, y eso se llama fracaso.

Lamentablemente el señor Isidro Romero se prestó para liderar una lista (solo eso) que detrás escondía a la misma gente anterior que pensaron que ahora sí harían algo bueno, pero en la repetición de los fracasados está el fracaso repetido, y por eso son los resultados malos que viene cargando el club en el campeonato nacional.

No es que la distancia tiene que ver con la mala o ninguna dirección del club, es simplemente que se fue el “presidente” para que los mismos de la directiva anterior manejen al equipo. Por eso nada se saca con pedirle únicamene a él la renuncia si realmente no es nada en esa directiva.

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Para que la situación cambie desde la cabeza, lo que se tiene que pedir es que renuncie la directiva y se convoque a elecciones para una nueva directiva que no tenga entre sus miembros y esté coprometida con la actual que es la misma anterior. La cosa es así de sencilla si realmente se quiere mejorar.

Ab. Carlos Muñoz Zambrano
Guayaquil

Los valiosos triunfos obtenidos por los ídolos del Astillero –Barcelona y Emelec– en el largo historial deportivo ciertamente  son inolvidables y llenan de orgullo a sus grandes hinchadas.

Llena de orgullo, sobre todo, por cuanto para los futbolistas de antaño representaba un verdadero honor vestir la camiseta amarilla o la azul, tanto en los torneos nacionales como internacionales. Pero hoy, que ambas instituciones referentes del fútbol ecuatoriano están cumpliendo 80 y 76 años de vida, respectivamente, los miles de seguidores muestran una evidente decepción  por la crisis futbolística, económica y dirigencial que atraviesan y que se reflejan en la pésima campaña que vienen cumpliendo en el presente campeonato.

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Ante este triste y desolador panorama urge que los jugadores de estos importantes clubes del país, que tienen una deuda pendiente con sus aficionados por los malos resultados logrados,  demuestren un mayor grado de profesionalismo –porque mucho se comenta que algunos andarían en  farras– y justifiquen las elevadas sumas de dinero que cobran solo por jugar a manera mediocre al fútbol.

Lcdo. Jhonny Muñoz Lima
Guayaquil