Víctor Mendoza es directo al narrar entretelones de las campañas futbolísticas con Barcelona. Hace hincapié en la disputa por el puesto del arco con dos ex compañeros.
Las alternativas para la portería eran tres: Carlos Luis Morales, Walter Guerrero y Espartaco.
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“En 1985 compartí el arco con Morales y Guerrero, la situación era complicada, pero fui titular varias veces en ese año. Con Morales sí hubo rivalidad, con Guerrero no; él era muy humilde, creo que se despreocupó del arco y me dio más posibilidades.
En cambio, Carlos Morales iba con los dirigentes a pedir la titularidad. No sé qué forma era esa de pelear por el puesto”, se pregunta Mendoza.
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“Con Morales no hay relación de amistad y prefiero no tenerla. No me gusta la hipocresía, hay que ser leal con los compañeros. Siempre trató de sacar ventaja como no debía. Habegger me dio la titularidad en 1991 y a él no le gustó. La titularidad se gana en las prácticas y el DT decide a quién pone”.