Sin suerte desde el debut de su carrera con la selección argentina, Javier Zanetti quiere por fin ganar un título internacional, contra Brasil en la final de la Copa de las Confederaciones, el miércoles en Francfort, para festejar su partido 101 con la albiceleste.
"Parece increíble haber jugado 100 partidos con la selección argentina", explicó el defensa de 31 años, tras la semifinal ganada por Argentina, el domingo contra México.
Publicidad
"Cada partido representa un motivo de orgullo. Me acuerdo de cada encuentro, desde el primero. Estoy feliz de haber alcanzado esa cifra", afirma el jugador, que está a seis partidos de igualar a Diego Simeone (106).
En 100 partidos (cinco goles) desde el 16 de noviembre de 1994, Javier Adelmar Zanetti se convirtió en una pieza esencial de la máquina argentina. Aporta toda su experiencia en el lado derecho de la defensa o en el centro y sólido, técnicamente, y combativo, sabe utilizar su velocidad para lanzar ataques desde lejos.
Publicidad
Nacido en Buenos Aires en una familia modesta -- de joven trabajaba con su padre, albañil, al mismo tiempo que jugaba al fútbol --, Zanetti se inicio en los equipos jóvenes de Independiente. En 1992, pasó una temporada en Talleres de Remedios de Escalda (Segunda), antes de ser traspasado a Banfield, donde fue descubierto por el seleccionador Daniel Passarella.
Zanetti debutó con Argentina contra Chile (3-0), en un joven equipo y participó en la Copa América de 1995, y después en los Juegos Olímpicos de Atlanta en 1996, donde Argentina fue batida en la final por Nigeria.
En segunda ronda del Mundial-98, marcó un gran gol contra Inglaterra, pero Argentina termina su recorrido en cuartos de final. El Mundial de 2002 será incluso más amargo, ya que Argentina cayó en primera ronda. En 2004, los argentinos se recuperaban y alcanzaban la final de la Copa América, perdiendo contra Brasil en los penales.
Su carrera en clubes también fue un éxito, pese a no logar grandes título. Detectado por el Inter de Milán, el "Pupi" firmó en 1995 para el equipo italiano. Convertido en el jugador más "veterano" de los "nerazzurros", resultó pieza clave de una formación inestable. Con el Inter ganó la Copa de la UEFA en 1998 y la Copa de Italia en 2005, pero el título nacional, el Scudetto, se le sigue escapando.
Con su gran corazón, en Argentina Zanetti fundó con su mujer una fundación, Pupi, para ayudar a los chicos desfavorizados de las zonas rurales.
Contra Brasil, Zanetti espera un partido difícil: "Hay que saber jugar partidos como contra México, sin espacios y con mucha presión. Pero Argentina siempre buscó el gol. Este equipo se merece estar en la final y espero que podamos llevar la Copa a Argentina".