Chile está analizando una atractiva oferta del gobierno holandés que incluye buques de guerra, aviones caza y tanques usados que resultarían muy convenientes para las arcas militares, abultadas por las ventas estatales de cobre, dijo este martes una fuente gubernamental.
Aunque la decisión de compra no es inminente, el ofrecimiento europeo podría ser autorizado por el presidente Ricardo Lagos antes de dejar La Moneda en marzo del próximo año y consideraría pagos y entregas graduales hasta el año 2014.
"La triple oferta de Holanda está sobre la mesa y es efectivo que actualmente se está analizando y hay conversaciones, pero nada es oficial hasta que se anuncia", dijo una fuente de gobierno del área de Defensa que pidió no ser identificado.
Las fuerzas armadas chilenas reciben un 10 por ciento de las ganancias por venta de cobre rojo de la gigante estatal Codelco, lo que el año pasado, debido a la escalada del metal, les significó casi 600 millones de dólares.
Parte de esos fondos fue usada en prepagar deuda, lo que dejó limpias sus líneas de crédito para renovar material bélico.
El ofrecimiento holandés se enmarca dentro de un plan iniciado el año pasado, cuando Chile anunció un acuerdo de negociación para la compra de fragatas usadas al país europeo.
La propuesta considera tres fragatas usadas en 250 a 350 millones de dólares, que recompondría una escuadra que, según la marina, requiere una modernización urgente.
También incluye entre 20 y 30 aviones caza F-16 refaccionados por 150 millones de dólares y un centenar de tanques Leopard II, que costarían unos 400.000 dólares cada uno.
Pese a que Chile ha insistido en que sus últimas compras de armamento son sólo para renovar material obsoleto, han sido causa frecuente de molestia entre sus vecinos pues lo ven como una nación que rompe los equilibrios de defensa en el Cono Sur.
Analistas esperan que la respuesta de países con los cuales Chile mantiene una tensa relación por problemas bilaterales, como Bolivia y Perú, no se haga esperar.