Pedí una copia certificada de inscripción de matrimonio en el Registro Civil de Guayaquil y me informaron que como el libro estaba destruido tenía que tramitarla en Quito.

Establecí contacto con una persona conocida en Quito, quien obtuvo –después que le dijeron que se había perdido la solicitud y que regresara– dos copias certificadas. Hubo que pagarles más para que dieran el documento, pues según el decreto que establece la tarifa, esta es solo de $ 0,50, si no había que esperar el trámite “normal”. Una vez que tuve las copias certificadas, las envié al Registro Civil; dijeron que ahora había que hacer la “recepción” –otro trámite–. Nuevamente citaron a mi enviado para ocho días después. Luego de eso me imagino que ya se podrá hacer el trámite original que solicité, que es una subinscripción, que también demorará ocho o quince días. En cada ida hay que comprar otra especie valorada.

¿Han visto cómo los empleados custodian los libros donde se guardan las actas con inscripciones? Yo sí. Los tienen muchas veces en el piso, los tratan como papeles sin valor, los tiran. Creo que los roedores se comen el papel y cuando llueve –como el techo tiene muchos orificios– les cae agua. ¿Los usuarios somos responsables que esos documentos tan maltratados se dañen y luego debamos pagar para que se restituyan las hojas? El artículo 93 de la ley de Servicio Civil, Identificación y Cedulación dice: “Reconstitución de inscripción.– Si se destruyeren o desaparecieran, total o parcialmente, uno o ambos ejemplares de una inscripción, el Director General de Registro Civil, Identificación y Cedulación ordenará, de oficio y en forma gratuita, la reconstitución de la inscripción”.

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Claramente dice la Ley que el trámite será gratuito, sin que medie solicitud alguna de parte del interesado, ni se haga ningún trámite como el que yo estoy haciendo.
Lo relatado lo vemos en todas las esferas públicas y aun en algunas privadas. Es el actuar de la gente lo que debe cambiar. De nada sirve a los gobernantes de turno dotar de nuevas obras si la mentalidad es la misma de retraso, quemeimportismo. ¿No sería mejor colaborar, cada uno desde nuestros trabajos, en forma óptima lo que nos han encomendado?

Ab. Elvira Morla Larrea
Guayaquil