Fanny Bastidas volvió a llorar la mañana de ayer. Lo hizo en el Salón de la Ciudad, en el Municipio, al recordar a su hijo, el futbolista Otilino Tenorio, quien falleció el sábado pasado en un accidente de tránsito.
Doña Fanny no pudo contener las lágrimas frente a las cámaras de los medios de comunicación, mientras agradecía “por el cariño que tanta gente le tiene a su hijo”.
Fue luego de que el alcalde Jaime Nebot le entregó las llaves de una vivienda ubicada en la tercera etapa de la urbanización Mucho Lote, en el norte de la ciudad.
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Nebot indicó que jurídicamente el Municipio no puede hacer donaciones, pero que, sin embargo, no puede pasar desapercibido “el dolor de una familia pobre”.
El funcionario destacó las cualidades que como deportista demostró Otilino y explicó que la adquisición de la vivienda fue financiada mediante los sobrantes de la pasada Teletón, que se utilizan en beneficio de la niñez.
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Precisamente, Fanny Bastidas firmó las escrituras de la casa, no como beneficiaria sino como representante de los tres hijos de Otilino Tenorio. Todos menores de edad.
La villa 27 de la manzana 2455 de la tercera etapa de Mucho Lote recibirá a los pequeños Erick (2), Andy (3) y Jordi (6). Ellos acudieron ayer al Municipio en compañía de sus abuelos y su tío Allison.
Al evento también acudieron el presidente de Emelec, Jorge Arosemena, el jefe de Prensa de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, Pedro Mauricio Muñoz, entre otras personalidades del deporte.
La propiedad, que cuenta con tres dormitorios, sala, comedor y cocina, está valorada en 6.000 dólares, según Carlos Salmon, director de Terrenos del Cabildo.