La secretaria de Estado estadounidense,  Condoleezza Rice, dará un mensaje de democracia y apertura económica esta  semana en el marco de su primera gira por América Latina en un intento por  relanzar las relaciones de Estados Unidos con esta región. 
 
Durante este viaje, Rice tratará varios temas delicados, especialmente la  crisis en Ecuador y las dificultades que enfrenta la Organización de Estados  Americanos (OEA) para elegir a un secretario general. 
 
La jefa de la diplomacia estadounidense realizará visitas a partir del  martes a Brasil, Colombia, Chile y El Salvador, antes de regresar a Washington  el sábado. 
 
Luego de su gira por Europa en febrero, Asia en marzo y Rusia la semana  pasada, esta gira tiene el mismo objetivo: presentar los principales ejes que  guiarán el segundo mandato del presidente Bush e intentar corregir la imagen  negativa de Estados Unidos en la opinión internacional. 
 
Asimismo, esta visita apunta a relanzar las relaciones con una región del  mundo que ha sido relegada durante los últimos años por la administración Bush  debido a la prioridad otorgada a la lucha antiterrorista y a los conflictos en  Afganistán y en Iraq. 
 
Este viaje será "una oportunidad para definir un enfoque común con los  aliados democráticos de Estados Unidos" en esta parte del mundo, escribió el  viernes el Washington Post en un editorial. 
 
De todos modos, "no será fácil debido a la mala reputación que tiene la  administración Bush en la región, a los desacuerdos con los gobiernos de  izquierda de Brasil y Chile, y a la oposición persistente de Chávez" a  Washington, advirtió el cotidiano. 
 
Por su parte, el departamento de Estado consideró que se trata "de un viaje  importante, porque tenemos aliados capitales en América Latina". 
 
En tanto, Rice buscará dar un mensaje de apoyo a la "democracia, al  desarrollo de la sociedad civil, al espíritu de empresa, a la reforma  económica, las zonas de libre cambio, los buenos gobiernos, la transparencia y  la lucha contra la corrupción", añadió el portavoz adjunto del ministerio  estadounidense de Asuntos Extranjeros, Adam Ereli. 
 
En ese contexto, la crisis en Ecuador tras la destitución del presidente  Lucio Gutierrez, que ha demostrado la debilidad política y social de una gran  parte de la región, será uno de los temas de discusión. 
 
Las entrevistas también apuntarán a la dificultad para elegir a un nuevo  secretario general de la OEA, luego del empate en reiteradas vueltas con 17  votos que obtuvieron el ministro mexicano de Relaciones Exteriores, Luis  Ernesto Derbez (respaldado principalmente por Estados Unidos, Canadá, Perú y  Costa Rica), y el ministro del Interior chileno, José Miguel Insulza (apoyado  por Brasil, Venezuela, Uruguay y Haití). 
 
En el caso de Brasil, la visita resulta una buena oportunidad para pedir el  apoyo de Estados Unidos a la candidatura del país como miembro permanente del  Consejo de Seguridad de la ONU. 
 
En tanto, en Colombia, el primer productor mundial de cocaína, Rice  abordará el tema de la lucha anti-droga en la que Washington se encuentra  comprometida.
El viaje de Rice a El Salvador apuntará a agradecerles por el apoyo que aún  brindan a la coalición militar en Iraq, siendo el único país de América Latina  que aún la integra, luego del retiro de Nicaragua, Honduras y la República  Dominicana.