Los bananeros de Ecuador y las españolas Islas Canarias dejaron, ayer, la puerta abierta a un acuerdo que impida que los productores del país latinoamericano interpongan una denuncia contra la Unión Europea por el nivel arancelario que prevé imponer a la fruta desde enero del 2006. No obstante, ratificaron su rechazo a una posible tarifa de 75 euros por tonelada.