Al menos una persona murió y varias más resultaron heridas luego de que cuando menos cinco rondas de morteros estallaron en el centro de Bagdad este jueves, entre ellas dos en la Zona Verde, el lugar fortificado donde se encuentran el gobierno interino de Irak y varias embajadas, dijeron testigos.
Gruesas columnas de humo se alzaron desde el lugar de las explosiones, con sirenas resonando por la Zona Verde. Dos helicópteros militares estadounidenses del tipo Blackhawk aterrizaron apenas minutos después de las detonaciones, que parecían ser de morteros.
Soldados norteamericanos e iraquíes buscaron protección.
Unos minutos después, más morteros cayeron del otro lado del Tigris. Uno de ellos cayó cerca de una agencia de telefonía celular en el barrio de al-Arasat, con saldo de un muerto y tres heridos, dijo el teniente de policía Mujsin Jazim. Testigos también informaron que hubo heridos a consecuencia de otras explosiones en los alrededores de Bagdad, pero el número de víctimas no fue determinado.