Los geólogos consideran que el humo y el vapor que lanzó hoy el volcán St Helens, al noroeste de EEUU, vaticina una próxima erupción, pero algunos expertos estiman que esta actividad podría continuar durante semanas.
 
Los geólogos señalaron que la emisión de humo y vapor de hoy, que duró unos 40 minutos, no supuso una erupción, ya que el volcán aparentemente no expulsó material volcánico.
 
Bill Steele, del laboratorio de sismología de la Universidad de Washington, en Seattle, señaló por su parte que la actividad en el volcán podría continuar durante semanas, aunque aclaró que de momento no hay datos suficientes para saber a ciencia cierta cómo se comportará el volcán.
 
Como medida de prevención, las autoridades de este parque volcánico situado a 155 kilómetros al sur de Seattle (en el estado de Washington) han elevado el nivel de alerta y han ordenado la evacuación obligatoria del área circundante.
 
La orden de evacuación afecta también a un centro de visitantes situado en el observatorio de Johnston Ridge, a unos 8 kilómetros de cráter del volcán.
 
Mientras tanto, la Administración Federal de Aviación (FAA) de EEUU ha prohibido que los aviones sobrevuelen una zona de unos ocho kilómetros alrededor del volcán.
 
No obstante, los expertos creen que, si finalmente se produce la explosión, no será tan terrible como la de hace 24 años, cuando murieron 57 personas y quedaron destruidos numerosos hogares por la erupción del volcán.
 
Esto es así porque, entre otros motivos, con la explosión de 1980 el volcán perdió buena parte de su altura, cerca de 400 metros.
 
"El volcán es bastante más bajo. Tiene menos volumen como resultado de la erupción de 1980", dijo a la prensa Bonnie Lippitt, del Servicio Forestal de EEUU.