Una mujer murió este lunesal explotarle una granada que manipulaba en el interior de un automóvil en un aparcamiento en los bosques de Viena y que aparentemente pertenecía a un arsenal ilegal procedente de la antigua Yugoslavia.
 
Según informaron este lunes  en Viena fuentes policiales, la muerte de la mujer, una austríaca de 39 años, se produjo esta mañana en el oeste de la periferia de la capital austríaca.
 
Los primeros indicios de la investigación iniciada sobre el caso apuntan a que el accidente mortal está relacionado con el hallazgo hace diez días cerca de Viena de un gran arsenal de armas ligeras procedentes de la antigua Yugoslavia.
 
Hoy, "en el maletero del coche encontramos bolsas negras de plástico que contenían rifles kalanishkovs y granadas", señaló a la prensa el teniente coronel Rudolf Gollia, portavoz del ministerio austríaco del Interior.
 
Fue la información de un reportero austríaco que investiga el tráfico de armas lo que permitió a la policía encontrar hace diez días las citadas armas ilegales, ahora confiscadas.
 
Este mismo periodista alertó hoy a la policía de que en un aparcamiento en los bosques de Viena iba a producirse esta misma mañana una transacción de armas.
 
Junto con miembros de la Oficina Federal para la Defensa de la Constitución y la Lucha contra el Terrorismo (BVT), el reportero acudió al lugar de la presunta cita donde encontraron el cadáver de la mujer en el interior de un vehículo seriamente dañado por la explosión.
 
En base a declaraciones de varios testigos que oyeron la explosión, la policía presume que la mujer, madre de una menor, murió al explotar una granada que manipulaba cuando intentaba sacarla del maletero para esconderla en los bosques vieneses.
 
Las autoridades investigan asimismo si la fallecida se encontraba sola o acompañada cuando se produjo la deflagración.