Paraguay se llevó la plata e Italia el bronce en los Juegos de Atenas 2004.

Argentina logró en Atenas 2004 adueñarse del oro de los Juegos Olímpicos, el único gran trofeo internacional que faltaba en las vitrinas de su fútbol, tras un torneo que marcó la entrada al podio por primera  vez de Paraguay, en una reafirmación de hegemonía sudamericana.

Con un gol de Carlos Tévez ante Paraguay, que se llevó la plata, la selección albiceleste rompió una racha de 52 años de su país sin ganar preseas doradas, desde la lejana Helsinki 1952 cuando la pareja de remo formada por Tranquilo Capozzo y Eduardo Guerrero se adjudicó la prueba.

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Los paraguayos se subieron por primera vez al Olimpo con una histórica medalla de plata, punto final de un camino iniciado cuando eliminó a la superpotencia mundial Brasil en el preolímpico de Chile disputado en enero pasado.

Una nueva generación se abrió paso en Argentina, integrada en parte por los que tuvieron su bautismo de fuego al ganar el Mundial Sub 20 de Argentina 2001,  como Andrés D’Alessandro, Fabricio Coloccini y Javier Saviola.

Otros venían progresando por cuerda separada, como Carlos Tévez, estrella del equipo con una explosiva combinación de habilidad y potencia de pura cepa  argentina, que no responde a oscuras tácticas de laboratorio.

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Los argentinos se llevaron también el “moro”, porque terminaron invictos, con seis triunfos en otros tantos partidos, marcaron 17 veces y jamás les batieron la valla, además de tener al goleador olímpico, el Apache Tévez, con ocho anotaciones en total.

Los gauchos completaron en Atenas un collar de perlas, que engarza dos campeonatos mundiales de mayores de la FIFA, en Argentina 1978 y México 1986, y cuatro mundiales de la categoría Sub 20 (Japón 1979, Qatar 1995, Malasia 1997 y Argentina 2001).

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“Este equipo merecía el título, fuimos los mejores”, dijo Carlitos, el simple apodo que prefiere Tévez, después de que le colgaran la medalla de oro en su cuello y le impusieron la corona de laurel. “Todavía no caigo, tengo una sensación única”, recalcó feliz.

El atacante que en Atenas abrió los ojos del mundo futbolístico y que despertó el interés del club holandés PSV Eindhoven, además del que había mostrado el Bayern Munich de Alemania, también recordó en el momento de gloria al técnico de la selección, Marcelo Bielsa, quien con el oro superó una crisis que comenzó en el Mundial del 2002 y se agravó con la pérdida de la Copa América.

“Me alegro también por (Marcelo) Bielsa, porque es muy criticado y merecía este triunfo”, aseguró y recalcó: “Es un hombre muy trabajador y una gran persona”.

El bronce para Italia

Los italianos, que en semifinales cayeron ante Argentina, se fueron con el sabor amargo de quedar afuera de la final. Pero ayer ganaron 1-0 a Iraq, lo que les permitió pintar de azul el bronce.

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Los iraquíes se sobrepusieron a los horrores de la guerra y se convirtieron en revelación del certamen, con un fútbol sacrificado y batallador, pero inexperto y a veces ingenuo. Habrá que memorizar los nombres de Razzaq Farhan y Qusai  Munir, delanteros audaces, de buen manejo de pelota, que pueden ser el pilar de una futura selección competitiva.

HOY, LA FINAL

ACTO
A las 13h15 de Ecuador comienza la Ceremonia de Clausura de los XXVIII Juegos Olímpicos de Atenas 2004.

A CHINA
La antorcha olímpica será entregada a Pekín, próxima sede en los Juegos que serán en el 2008. El afamado director de cine chino Zhang Yimou ha prometido asombrar a la multitud de Atenas con una “fusión de la herencia china y cultura moderna”.