La primera bicicleta de la flamante campeona del mundo de ruta, la australiana Sara Carrigan (23 años), fue un préstamo de diez semanas que le hicieron cuando tenía 16 años, en un programa de jóvenes talentos. “Nos prestaban la bicicleta. Así fue como empecé a dedicarme al ciclismo”, dijo la deportista.